• Los buques procedentes de Asia comienzan a asentar las nuevas rutas por el sur de África, sin afectar a la cadena logística, tras los desvíos provocados por la crisis del Mar Rojo

València, 19 de enero de 2024.- El Puerto de València trabaja con “total normalidad”, tanto con los barcos de rutas atlánticas y mediterráneas como con los buques portacontenedores afectados por la crisis del Mar Rojo que ha forzado a bordear determinados tráficos por el sur de África para llegar al Mediterráneo. “En estos momentos, el Puerto de València tiene suficiente capacidad para soportar esta situación. Hubo un problema que se detectó en un principio por la demora en la navegación que esta crisis generó, pero ahora está solventado”. Así lo ha explicado Néstor Martínez, subdirector general de Desarrollo de Negocio de la Autoridad Portuaria de València (APV).

La peligrosidad de la situación bélica en el Mar Rojo provocó que navieras importantes con grandes buques de contenedores de 400 metros de eslora dejasen de acceder a las terminales valencianas atravesando el Canal de Suez y haciendo diversas escalas por el Mediterráneo.

Para seguridad de sus tripulaciones y de las mercancías, estas empresas optaron por bordear África, por el Cabo de Buena Esperanza; una vuelta que alargó en 10 o 12 días la travesía, con el consiguiente retraso en la llegada a puerto de destino. El retraso afectó a la cadena logística de estos barcos que hasta la crisis del Mar Rojo llegaban a València vía Suez.

“Los barcos – detalla Néstor Martínez – ya están comenzando a llegar con regularidad; por lo que los usuarios, cargadores e importadores del Puerto de València pueden estar tranquilos. El puerto seguirá prestando servicio; y, por tanto, las empresas pueden seguir adelante con sus proyectos de exportación e importación, sabiendo que tienen garantizada la distribución, y que la cadena logística no se verá interrumpida”.

Según el Néstor Martínez, “la experiencia que nos aportó la Pandemia, no solo al puerto de València, sino a toda la cadena logística mundial a los puertos, a los transportistas y operadores hace que todo el mundo esté poniendo su granito de arena para que esto funcione. En estos momentos no hay ningún motivo de alarma. El Puerto de València tiene suficiente capacidad para soportar esta situación. Hubo un problema que se detectó en un principio por la demora de esos diez o 12 días, y ya está solventado”.

Para el directivo del puerto líder del Mediterráneo en tráfico de contenedores, “el Puerto de València, el puerto de Algeciras, como puertos de Marruecos y el de Barcelona que tienen infraestructuras para grandes buques de contenedores pueden verse utilizados para recoger la mercancía destinada a puertos mediterráneos al haberse convertido nuestro mar en un saco con fondo, porque antes el barco pasaba por el Canal de Suez. Ahora cuando llega a València hay que volver a distribuir y no pasará por los puertos de Gioia Tauro, Pireo, Malta etc. Ahora no van a llegar allí porque el armador ordenará la vuelta vara regresar a Asia por el Cabo de Nueva Esperanza. Eso es lo que puede pasar, por tanto, no hay problema a la vista”. “De momento estamos haciendo el seguimiento normal, como habitualmente se hace en estos trabajos, tanto en la operación marítima como en la terrestre”. “La capacidad del puerto de VLC está garantizada. En estos momentos las terminales tienen holgura suficiente para soportar este incremento de tráfico teniendo en cuenta que la distribución va a estar garantizada porque las empresas navieras tienen que distribuirlo a nuestros países vecinos con los barcos “feeder” (buques de menor tamaño que los oceánicos) que tengan que programar; y en cualquier caso, desde la Autoridad Portuaria estamos en permanente contacto con las principales navieras para resolver cualquier circunstancia que pudiera derivarse de esta situación porque nuestro objetivo es ser facilitadores del comercio”, ha concluido.