Somos responsables del estado ambiental del territorio donde desarrollamos nuestra actividad y trabajamos para mantener en excelentes condiciones los suelos y aguas subterráneas. Los ejes sobre los que se asienta el desempeño de este objetivo son: la prevención de la contaminación, el seguimiento de las zonas concesionadas y no concesionadas y la ejecución de medidas de corrección si fuera necesario.
Prestamos especial atención a la gestión y el estado del suelo en aquellas instalaciones cuyo CNAE (código nacional de actividad económica) esté incluido dentro de actividades potencialmente contaminantes del suelo.

Las principales acciones que llevamos a cabo incluyen:
- Solicitud de informes de situación del suelo a las empresas concesionarias, según lo establecido por la legislación vigente, para evaluar posibles riesgos de contaminación.
- Revisión de informes y, si es necesario, solicitud de análisis adicionales a las concesiones, que ayuden a evaluar la contaminación del suelo de acuerdo con la normativa.
- Incorporamos la obligación de analizar el suelo al inicio y final del periodo concesional para evaluar y asegurar que no ha existido contaminación del suelo y de las aguas subterráneas producto de su actividad.
Informamos a las empresas sobre sus obligaciones en relación con la gestión del suelo, y actualizamos los requisitos legales, especialmente los cambios introducidos por la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados.