El investigador del Instituto de Economía Internacional (IEI), Vicente Pallardó y el presidente del puerto y catedrático de economía, Aurelio Martínez coinciden: “No podemos permitirnos que una empresa exportadora pierda un cliente por no poder financiar una venta internacional. Tampoco que una empresa viable cierre por falta de liquidez”.

Vicente Pallardó considera que 2021 será un año de fuerte crecimiento económico y recomienda el mantenimiento a toda costa del sector exportador que ya ayudó a salir de la Gran Recesión de 2008.

El informe prevé la vuelta a los niveles del PIB anteriores al coronavirus durante el último trimestre de 2021 o el primer trimestre de 2022.

Pallardó ha defendido la necesidad de mantener las inversiones públicas porque cancelarlas supondría duplicar el alargamiento de la crisis

València, 22 de abril de 2020.- El sector económico exportador va a jugar un papel clave en la recuperación de la actual crisis económica derivada del coronavirus. Así lo ha afirmado esta mañana Vicente Pallardó, analista de coyuntura económica del Instituto de Economía Internacional (IEI) durante la presentación del Informe trimestral enero-marzo de 2020 de Entorno Económico Global que elabora para la Fundación Valenciaport y para la Autoridad Portuaria de Valencia (APV). Durante el acto, que ha contado con la presencia de Aurelio Martínez, presidente de la APV y de la Fundación Valenciaport, y de Antonio Torregrosa, director general de la Fundación Valenciaport, Pallardó ha ahondado en la situación económica actual ocasionada por la pandemia del COVID-19 y las perspectivas de futuro.

En concreto, Pallardó ha explicado que “estamos abocados a la mayor recesión desde la Segunda Guerra Mundial. Se prevé que el PIB global retroceda entre el 3 y el 5% mientras que para España, mi estimación es que el PIB caerá un 10%. Vamos a asistir a una caída apreciable en el primer trimestre, seguida de un desplome en el segundo trimestre, un tercer trimestre con apenas recuperación que mejorará ya en el cuarto trimestre del año. Los niveles de finales de 2019 o principios de 2020 los recuperaremos a finales de 2021 o principios de 2022”. Asimismo, el informe también predice un aumento del 15% del déficit público, un 20% de tasa media de desempleo (lo que implica meses con tasas superiores cercanas al 25%), una inflación cercana al 0 y un aumento del superávit por cuenta corriente tanto en 2020 como en 2021.

Ante este panorama, Pallardó ha reivindicado la importancia del sector exportador español. “Hay que tener en cuenta que la crisis es mundial pero la recuperación va a ser relativamente asimétrica. 2021 va a ser un año de fuerte crecimiento económico y, por eso, es fundamental sostener al aparato exportador que ya nos ayudó a salir de la anterior crisis. Desde entonces hemos incrementado el número de empresas exportadoras que trabajan no solo con Europa sino con todo el mundo y hemos mejorado notablemente nuestra cadena logística. La clave está ahí porque la recuperación no está a años vista. No podemos permitirnos que una empresa exportadora pierda un cliente por no poder financiar una venta internacional. Tampoco que una empresa viable cierre por falta de liquidez”, ha dicho, coincidiendo con su contertulio de pantalla de Webinar, Aurelio Martínez; presidente de la APV y Catedrático de Economía Aplicada.

Sobre las previsiones de futuro para la Comunitat Valenciana, Pallardó ha explicado que es complicado realizar una estimación porque dependerá de si finalmente se produce una apertura asimétrica pero ha recalcado que, a nivel exportador, la Comunitat está mejor posicionada que la media española para que el tejido empresarial exportador arrastre a la economía.

Con esta coyuntura, Pallardó y Aurelio Martínez han coincidido en defender la importancia de las inversiones públicas y privadas, como el caso de la nueva terminal de la ampliación norte del puerto de Valencia. “Necesitamos de manera imperiosa -ha recalcado Pallardó- no dejar atrás los proyectos. Me preocuparía enormemente la idea de centrarnos únicamente en el corto plazo y cancelar todos los proyectos de inversión porque entonces tardaremos el doble en salir de la crisis. Debemos mantener la inversión pública y el partnetariado público-privado”. En este mismo sentido se ha pronunciado el presidente de la APV que ha recordado que “es necesario tener perspectiva a largo plazo. Todos los indicadores -incluso los más pesimistas- dicen que los niveles del PIB se van a recuperar a finales de 2021 o principios de 2022. Por ello, es vital que el sector público acelere los trámites para sacar inmediatamente todos los proyectos de inversión importantes porque tendrían un efecto de arrastre sobre la economía muy beneficioso y evitaría un mayor impacto en el empleo. Todos sabemos que después de una crisis viene una recuperación y una expansión; por tanto, aceptando que los tráficos se van a recuperar y que la nueva terminal estará operativa dentro de 7 u 8 años, no podemos quedarnos de brazos cruzados. Tenemos que actuar para estar en condiciones de aprovechar el ciclo cuando llegue la recuperación. De lo contrario perderemos una oportunidad histórica. Pero hay más – ha insistido Aurelio Martínez- porque si hay un inversor privado que va a invertir 1.000 millones de euros es porque habrá hecho también sus cálculos. Por lo que hay que actuar ya, porque para salir de la crisis tenemos que sumar el esfuerzo de todas las administraciones públicas y del sector privado; lanzar los planes de inversión durante el segundo semestre de este año y dar así un gran impulso a la actividad económica y a la creación de empleo”.

Pallardó también ha abundado en los cambios estructurales que originará la actual crisis generada por el COVID-19. En concreto, ha explicado que es altamente probable que las empresas internacionalizadas repiensen la estructura de sus cadenas globales de valor para evitar la dependencia de una única localización fabril. A este respecto, ha indicado que “No es lo mismo relocalizar que volver al origen. Una cosa es situarse en otros países y otra cosa es que todo lo que se produce en China vuelva a Occidente. Eso se va a producir en ámbitos muy estratégicos como el sanitario pero no va a ser generalizado. La seguridad del suministro va a ser importante pero el factor coste se va a seguir manteniendo”. En paralelo, es probable que las empresas acepten la generación de stocks y se revise el “Just in Time”, la producción bajo demanda previa que conlleva una reducción al mínimo de los stocks.

Sobre los programas de respuesta que deberían adoptarse para hacer frente a la situación económica, Pallardó no se ha mostrado favorable a los eurobonos en estas circunstancias. “Los eurobonos son un elemento de respuesta estructural en los que está el futuro de Europa. Se necesita todo un programa de pasos para ponerlo en marcha que llevan meses y no disponemos de ese tiempo para poder gastar el dinero. Los eurobonos son un programa estructural que deben permitir el nuevo crecimiento de Europa. Ha sido más eficiente liberar 500.000 millones de euros; y si hacen falta más, liberar otros 500.000. También debe considerarse la posibilidad de la emisión de deuda perpetua; dinero que pedirían los estados miembros de la UE para no devolverlo nunca, e invertirlo – bajo estricta vigilancia- en proyectos y acciones para salir de la crisis en el menor tiempo posible”.

Pallardó tampoco se ha mostrado partidario de que los bancos centrales de los países europeos compren acciones de empresas ante el peligro de las inversiones soberanas chinas o de otros países. “Está la opción de las acciones de oro o la de la prohibición de que este tipo de fondos entren en empresas estratégicas”, ha dicho.

Informe de entorno económico 

El informe de entorno económico se puso en marcha a finales de 2019 para completar el índice Valencia Container Freight Index (VCFI) que se publica mensualmente con la evolución del precio de los fletes de exportación desde el puerto de Valencia. Este informe tiene por objetivo ayudar a comprender el contexto en el que se desarrolla la actividad comercial marítima a nivel global.

El informe se encuentra dividido en tres secciones: la primera de ellas, Clima Económico y Tendencias en el que se analiza de forma sintetizada los principales elementos que determinan el entorno económico global; la segunda, Decálogo de situación, en la que se desarrollan los datos y decisiones más importantes acaecidos en los meses previos a la realización del informe y que explican la evolución económica global; y por último, la sección Al Microscopio, que ofrece un conocimiento en mayor detalle de algunos de los acontecimientos y procesos que inciden en la situación económica internacional.